[vc_row css_animation=»» row_type=»row» use_row_as_full_screen_section=»no» type=»full_width» angled_section=»no» text_align=»left» background_image_as_pattern=»without_pattern»][vc_column][vc_column_text]Existen ciertos sectores que entrañan mayores riesgos en su actividad que otros. Es el caso de la construcción, donde tanto profesionales de obra como terceros y bienes pueden sufrir daños originados como consecuencia de derrumbes de edificios, caída de objetos, incendios,descarga de materiales pesados, etc. En este sentido, es fundamental – y además obligatorio por ley – contratar un seguro de responsabilidad civil en la construcción.
No obstante, en líneas generales, ¿qué ventajas conlleva este tipo de póliza para cualquier empresa, forme o no parte del sector de la construcción? ¡Presta atención!
Ahorro en costes y tranquilidad
La responsabilidad derivada de las acciones de los profesionales en el desarrollo de su trabajo, ya sean daños materiales o personales, queda cubierta, lo que no solo proporciona la tranquilidad necesaria a la hora de desarrollar cualquier actividad, sino que ahorra en costes. Y es que ofrece cobertura ante cualquier imprevisto que implique el pago de indemnizaciones por daños y perjuicios a terceros, así como el aseguramiento de los gastos derivados de la defensa jurídica a consecuencia de un daño con responsabilidad civil.
Máxima cobertura para cada actividad
Actualmente, las aseguradoras incluyen planes y diferentes modalidades de seguro de responsabilidad civil para que cada usuario pueda elegir la que mejor se adapte a su actividad profesional. Por ejemplo, en el caso concreto del sector de la construcción, también existen seguros no obligatorios, pero sí recomendables, como son los seguros a todo riesgo. Y es que además de las previsibles incidencias, nunca se sabe si durante la ejecución de la obra se van a producir daños poco frecuentes, por ejemplo, como consecuencia de algún fenómeno natural.
La importancia del asesoramiento personalizado
Faltas o errores cometidos por personas de las que deba legalmente responder la empresa en cuestión, propiedades, arrendamientos o usufructo de todo tipo de instalaciones, daños por cualquier tipo de accidente, incluyendo los de trabajo, cuando la empresa cuenta con empleados asalariados… Cada actividad y compañía requiere un tipo de póliza diferente. Pero todas las empresas deben contar con la cobertura necesaria. Para conseguirlo, lo más importante es disponer de un asesoramiento personalizado y de calidad.
¿Buscas una compañía que satisfaga tus expectativas a la hora de obtener una visión general sobre los riesgos profesionales y patrimoniales a los que te expones? En General Risk podemos ayudarte, elaborando estudios especialmente diseñados para ti. [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
